El papa Francisco llegó este jueves a Perú para realizar una visita de tres días en la que se prevé abogará por la protección del medio ambiente y los pueblos originarios, en la segunda y última etapa de una gira iniciada el lunes en Chile.
El avión del pontífice aterrizó a las 16H32 locales (21H32 GMT) en el aeropuerto de la capital peruana, donde fue recibido al pie de la escalerilla por el presidente Pedro Pablo Kuczynski y su esposa, la estadounidense Nancy Lange, observaron periodistas de la AFP.
Un par de niños le entregó luego un ramo de flores y fue saludado por tres obispos, entre ellos el cardenal Juan Luis Cipriani, arzobispo de Lima.
Francisco y Kuczynski caminaron sonrientes por la alfombra roja conversando animadamente, mientras una banda militar interpretaba marchas.
Bajo un cielo seminublado, una persistente brisa le cubrió por momentos el rostro a Francisco con la parte superior de la sotana.
La visita del papa permite a Kuczynski olvidar, temporalmente, los conflictos políticos que lo tuvieron al borde de ser destuido en diciembre y la polémica por el indulto que concedió al expresidente Alberto Fujimori.
El papa argentino tiene previsto trasladarse posteriormente en un automóvil cerrado hacia la plazoleta del Inmaculado Corazón de María, donde se espera que aborde el papamóvil para ir a la Nunciatura Apostólica, donde se hospedará los tres días de su visita a Perú.
Francisco, quien no tiene previstas otras actividades públicas este jueves, viajará el viernes a Puerto Maldonado, en la Amazonía, donde tendrá un encuentro con pueblos originarios.
El sábado se desplazará a la ciudad norteña de Trujillo, que hace un año sufrió inundaciones causadas por el fenómeno del Niño Costero, que dejaron 162 muertos y casi 300.000 damnificados.
El domingo cerrará su visita a Perú con una misa multitudinaria en una base aérea de Lima, después de un encuentro con 5.000 sacerdotes y monjas en la Catedral, donde además honrará las reliquias de cuatro santos peruanos.
Francisco, un seguidor del fútbol, recibirá el domingo al entrenador de Perú, su compatriota Ricardo Gareca, que logró la hazaña de clasificar a la selección peruana al Mundial de Rusia-2018, algo que el seleccionado no conseguía desde España-1982.
Una semana antes de la llegada del papa a Lima, el Vaticano intervino al grupo laico peruano Sodalicio de Vida Cristiana, cuyo fundador Luis Fernando Figari y otros tres dirigentes están acusados de abusos sexuales.